Reseña: Cacao
Imposible contenerse: ¡este cacao es maravillao!
Phil Walker Harding es un autor que nos tiene acostumbrados a juegos rápidos, divertidos y simples, como Dungeon Raiders o Sushi Go! Sin embargo en Cacao se atreve con un juego de colocación de losas con toques de gestión de recursos ¿será su consagración como autor de juegos más duros o un intento fallido?
Es inevitable hablar de Cacao como un juego inspirado por Carcassonne, pero más allá de la mecánica de colocación de losetas son dos juegos totalmente distintos. Mientras que en Carcassonne gestionábamos el control de espacios en el tablero, en Cacao se le añade una capa adicional de estrategia al tener además que conseguir y vender recursos. O mejor dicho, recurso, pues en este juego se trata de comprar y vender... Cacao.
COMPONENTES

En la caja encontraremos 44 losetas de recolectores, 28 losetas de selva, 4 tableros de aldea, 4 meepeles, 20 frutos del cacao de madera, 12 fichas de Sol y 48 monedas de oro de distintos valores (1, 5 y 10).
Todos los elementos de cartón del juego son de la calidad que cabe esperarse de un juego editado por DEVIR, o sea, más que correcta. El grosor y la calidad de la impresión son sobresalientes y los elementos de madera (las semillas de cacao y los meeples) son correctísimos. El manual presenta las reglas de forma muy clara y gráfica, lo que hace que sea realmente fácil abrir la caja y ponerse a jugar casi de inmediato. Además también contaremos con un resumen de losetas de selva impreso por separado, muy de agradecer y al que recomiendo hacer un par de fotocopias para repartir al resto de jugadores, aunque no es imprescindible en absoluto.

Tiene gracia que en el libro de reglas podamos leer "Agradecemos la amabilidad de Hans im Glück Verlag al permitirnos usar las figuras del juego Carcassonne", en relación a los meeples que incluye el juego.
MECÁNICA DE JUEGO
Hay dos tipos de losetas básicas: las losetas de recolectores y las losetas de selva. Cada jugador tiene 11 losetas de recolector de su color que muestran una cabaña central y un número variable de recolectores distribuidos en los bordes de la misma, mientras que las losetas de selva muestran los diferentes emplazamientos que podremos encontrar al explorar la misma, y que pueden ser plantaciones de cacao simples, plantaciones dobles, mercados con valores de compra que van de 2 a 4, minas de oro con valor 1 o 2, cenotes (mantantiales), centros de culto solar y templos.
Al principio del juego cada jugador pondrá en su tablero de aldea al aguador en la casilla marcada como -10, mezclará las losetas de recolectores de su color y hará con ellas una pila. Tras esto, cogerá las tres losetas que estén en la parte superior, formando así su mano de juego inicial.

A partir de de ahora comienza la partida, empezando por el jugador de más edad, aunque yo prefiero empezar por el jugador que haya comido algo de chocolate de manera más reciente. Y me aseguro de haber sido yo también. Dulces trampillas que nos alegran el día, aunque sinceramente en este juego no importa quien empieza sino quien gana más pasta, y esto no se sabe hasta prácticamente el último turno.
Pues bien, sea por edad o por consumo de chocolate, el jugador debe ahora poner una loseta de recolectores de su mano en juego. Esta loseta debe ponerse de manera que uno de sus lados sea adyacente a una loseta de selva.
Si un jugador al colocar su loseta de recolector en su turno crea una o más esquinas formadas por dos losetas de recolector deberá rellenar ese hueco con una de las dos losetas de selva explorada disponibles. Después repone una loseta de selva explorada por cada loseta que haya usado cogiéndola de la pila de selva sin explorar.

Lo mismo ocurre si pusiese una loseta con dos recolectores junto a la loseta de plantación y un sólo recolector adyacente al mercado: recogería dos semillas, una por recolector, pero sólo podría vender una.
Las demás losetas funcionan de una manera un poco distinta, vamos a detallarlas a continuación.
Las minas de oro dan oro automáticamente en función de cuántos recolectores toquen con la loseta, de manera que si tenemos una mina de dos monedas y pones una loseta con dos recolectores, se llevará cada uno dos monedas, para un total de cuatro monedas.
Los cenotes (según la RAE "Depósito de agua manantial, que se halla en el Estado mexicano de Yucatán y otras partes de América, generalmente a alguna profundidad.", NosoloFREAK, aprende y diviértete) hacen avanzar al meeple aguador tantos remontes de río como recolectores toquen con esta loseta. Importante porque hay que recordar que al principio del juego los aguadores están en valor negativo.

Y por último están los templos. Estas losetas no dan monedas ni recursos de manera automática, sino que se puntuan al final de la partida en función al número de recolectores que tengan alrededor, dando seis puntos al jugador que tenga más recolectores, tres al segundo y cero al resto. Así, si el jugador rojo tiene cuatro recolectores en contacto con esta loseta, el jugador amarillo dos, el jugador blanco uno y el jugador lila ninguno porque es un lila, el jugador rojo se llevaría seis punttos, el amarillo tres y el resto cero.
Al final de la partida se hace recuento del dinero, añadiendo una moneda por cada ficha de Sol que no hayamos usado y el valor de nuestro aguador, que puede ir desde -10 hasta 16. El jugador con más dinero gana y el resto le debe invitar a chocolate con churros. Esto último no viene en las reglas, pero es una variante muy recomendable, sobre todo ahora que llega el invierno y apetece.
CONCLUSIONES
Un punto (otro) a favor de este juego es que además tiene una duración determinada: cada jugador recibe diez losetas de recolectores al principio de la partida (once si es una partida a dos jugadores) y una vez todos coloquen sus losetas la partida termina. Esto es bueno por dos partes, una es la que acabo de comentar, la duración, y la otra es que a veces tendremos que arriesgar en función a las losetas que nos queden: ¿pongo ahora esta loseta de tres recolectores y vendo a precio de tres monedas, o espero a ver si sale el mercado de cuatro monedas y puedo ponerla? ¿prefiero recoger agua del cenote ahora o arriesgo y espero a que la partida esté más avanzada?
Cacao nos va a hacer exprimir nuestro cerebro más de lo que puede parecer a primera vista, como también ocurría por ejemplo en "Pequeños grandes reinos", pero no por eso deja de ser un juego fácil de asimilar, relativamente rápido y tremendamente divertido en el que una mala colocación no significa tirar la partida, pero una buena tampoco te asegura la victoria.

En definitiva, que nos encontramos ante un gran juego que viene en una caja preciosa y bañado en chocolate ¿qué más se le puede pedir?
FICHA TÉCNICA
Cacao
Editorial DEVIR22 euros aproximadamente.
2-4 jugadores.
A partir de 8 años.
45 minutos.
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